“Un ejemplo de vitalidad que tienen frescos los recuerdos de décadas atrás”. Así definió ayer Rosa Muñiz, presidenta de la Asociación de Vecinos San Miguel de Villardeveyo a los diecisiete vecinos que fueron homenajeados por el colectivo vecinal.
La parroquia de Villardeveyo quiso, de esta forma, recuperar la memoria viva del pueblo con este encuentro para rendir homenaje a los mayores de 85 años. En total fueron once mujeres y seis hombres que compartieron vivencias, experiencias y multitud de anécdotas.
Los homenajeados fueron Antonio Fole López, Carmen Álvarez Villamarzo, Francisco Díaz García, Generosa Miguel Duarte, Josefina Pérez García, Ludivina Díaz Díaz, Luis Losada Villada, Marina Alonso Díaz, Marina del Busto González, María Amor García Llana, Oliva Díaz Blanco, Vidalina Linares López, José Antonio Menéndez Gutiérrez, Florentina Blanco González, Jovino garcía Alonso, Amalia Díaz López, José Manuel Martínez Álvarez, aunque este último no participó finalmente en el acto.
Todos recibieron una placa como recuerdo y homenaje y durante la presentación se proyectaron imágenes de su juventud en Villardeveyo.
Raquel Díaz, hija de la homenajeada Oliva Díaz Blanco, intervino en el acto valorando que “este pueblo no olvida a sus mayores”. “Nuestros padres pasaron por tiempos muy difíciles y nos supieron dejar el mejor ejemplo”, destacó Díaz quien recordó que los mayores “trabajaron de sol a sol porque querían que sus hijos tuvieran una vida mejor, que pudieran estudiar y que las hijas tuvieran las mismas oportunidades que los varones”. Raquel Díaz agradeció a la asociación, en nombre de todos los homenajeados, la organización de un acto “tan guapo, tan cargado de ilusión y de emociones”.
“Ha sido un homenaje hermoso, mejor sería imposible”, afirmó Generosa Miguel Duarte, una de las homenajeadas quien se mostró “muy agradecida a la asociación”. Generosa contó que, aunque actualmente vive en Avilés, visita Villabona cada semana donde vive una hija. “Me siento de Villabona de toda la vida, mis hijos nacieron aquí y estoy orgullosa de este pueblo”, comentó satisfecha.
Jovino García Alonso, uno de los más aplaudidos junto a su mujer, Amalia Díaz López destacó la costumbre de su casa “de armar grandes tertulias”. “Eso se logra siendo afable con los vecinos”, aseguró el homenajeado. “Lo importante es ser buenas personas y por eso nos quieren muchísimo”, afirmó Amalia Díaz, a la que todos llaman Malita y a la que agradeció “este homenaje tan hermoso tanto a los amigos como a la familia que nos acompañan”.
Francisco Díaz García tiene 89 años y destacó la labor de la asociación vecinal al tiempo que agradeció la organización “de “actos como éste”. “Es una cosa muy buena aunque sólo sea por la reunión”. Díaz García nació en Carreño pero su padre era de Villabona. Después de vivir en La Miranda se casó y trasladó su residencia a Villabona que considera “mi pueblo”.
Otra de las homenajeadas fue Florentina Blanco González que también disfrutó del acto. “Es estupendo que reconozcan a las personas mayores porque quiere decir que nos estamos modernizando, que nos están reconociendo”, valoró la mujer. Con 87 años la homenajeada considera que está “muy bien y la fórmula es no fumar, no beber, trabajar mucho y aguantar la vida”.
La presidenta de la asociación San Miguel de Villardeveyo hizo un llamamiento a los vecinos a que se sumen al colectivo. “Una asociación vive de los socios y cuantos más seamos más fuerza tendremos para ir a pedir cosas y a reclamar mejoras para el pueblo”, valoró la presidenta vecinal quien añadió que el trabajo del colectivo se desarrolla a lo largo de todo el año.
Al homenaje de ayer asistió el alcalde de Llanera, Gerardo Sanz, además de varios concejales de la Corporación municipal. El regidor del concejo recordó que la nueva directiva de la asociación sólo lleva un año en el cargo y destacó el buen trabajo que hace “por la unión del pueblo”.