Ya llegó el frÃo y los dÃas de verano han quedado atrás. Esto trajo consigo el dilema de encender la calefacción, pero sin tener que gastar tanto dinero. Además, la crisis de energÃa por el conflicto entre Rusia y Ucrania ha puesto en jaque a las familias españolas, que buscan alternativas para ahorrar en calefacción.
Para ayudar a la economÃa familiar, existen algunos consejos que, según los expertos, te evitarán derrochar tanta energÃa en calefacción, con lo cual podrás ahorrar más dinero en el recibo de energÃa.
Los errores que cometes con la calefacción y que te hacen perder dinero
Lo más seguro es que estés cometiendo alguno de estos errores con tu calefacción, y lo peor es que ni siquiera habÃas notado que estás derrochando una pequeña fortuna:
Encender y apagar la calefacción a cada rato
Uno de los errores más comunes es apagar y encender el sistema de calefacción varias veces al dÃa. Inclusive, las personas apagan la calefacción cuando tienen calor y al rato la vuelven a encender.
Estos constantes apaga-prende, lo que hacen es consumir más energÃa y aumentar el recibo de la luz.
Subir demasiado la temperatura
La OCU recomienda ajustar la calefacción entre unos 19 a 21 ° C. De esa manera, se consigue una sensación térmica equilibrada. Por eso, si subes demasiado el termostato, subirá el calor, pero también tu recibo de energÃa.
Dejar encendida la calefacción cuando no hay nadie en casa o en las habitaciones vacÃas
Si vas a estar todo el dÃa fuera de casa, lo ideal es programar un temporizador para que encienda la calefacción una hora antes de que llegues a tu hogar. AsÃ, cuando sea el momento de llegar, el ambiente estará cálido.
Otro de los errores más comunes es dejar las puertas de las habitaciones vacÃas abiertas, lo que es un gasto innecesario de energÃa, ya que no hace falta calentar los espacios en los que no están las personas.
No poner cortinas en las ventanas
Al igual que el sol del verano penetra por el cristal de las ventanas, el aire gélido también. Por lo tanto, es recomendable que instales unas cortinas o persianas para evitar que el frÃo se cuele hacia el interior y baje más la temperatura en las habitaciones.
Olvidarse del mantenimiento de los calefactores
El mantenimiento regular les permite a los sistemas de calefacción trabajar con mayor eficiencia. En este sentido, es esencial limpiar con regularidad los filtros, purgar las tuberÃas y no obstruir las rejillas de salida del calor.
Y no olvides que el radiador no es una secadora de ropa, ya que cuando le colocas prendas de vestir sobre las rejillas, estás forzando al aparato y consumiendo más cantidad de energÃa.
No ajustar la temperatura en los distintos ambientes
Es un hecho que no todas las habitaciones necesitan la misma sensación de calor. En consecuencia, ajusta la temperatura de la calefacción de acuerdo a cada caso en particular.
Por ejemplo, en las zonas en las que el sol dé con más regularidad, puedes poner el termostato en unos 19 a 20 °C. Asà ahorras más energÃa y consigues un buen equilibrio en la habitación. Igualmente, por las noches puedes bajar más la temperatura de la calefacción para ahorrar energÃa.
Olvidarte del aislamiento
Sin dudas, este es uno de los errores que puede salirte más caros en cuanto a la calefacción. Un buen aislamiento térmico te ayudará a mantener el calor en la zona exterior por más tiempo. Además, permite que los sistemas de calefacción trabajen más rápido y con eficiencia.
No revisar las paredes, puertas y ventanas para ver si hay grietas o fisuras
Cualquier fisura o grieta que esté en las paredes, en el techo, o en cualquier superficie del inmueble es una vÃa para que se escape el aire caliente. Obviamente, esto hace que la calefacción trabaje forzada, generando mayor consumo de energÃa.
Por lo tanto, tomate el tiempo para revisar estos detalles y corregirlos lo antes posible.
No aprovechar el calor ni ventilar la casa
Aprovecha los dÃas soleados para ventilar la casa. Puedes hacerlo cuando el sol esté más caliente, asà ayudas a que el interior del inmueble aumente un poco de temperatura de manera natural.
También es importante que revises tu contrato de energÃa para evaluar si puedes hacer cambio en algunas de las condiciones de la tarifa que tienes contratada.
Y no olvides que el radiador no es una secadora de ropa, ya que cuando le colocas prendas de vestir sobre las rejillas, estás forzando al aparato y consumiendo más cantidad de energÃa.